CAPRI, LA ISLA DE LAS SIRENAS.

Capri la Isla de las Sirenas

(septiembre 2013)

 

Desde el Puerto de Nápoles se coge un ferri y tras un viaje corto de media hora, mas o menos , llegas a Marina Grande un puerto anclado en el pasado, hermoso y muy concurrido.
La isla sólo mide  6 km de largo y 2,7 Km de ancho. Además de la belleza de su entorno, las leyendas y mitos la envuelven en un halo de misterio. Los lugareños cuentan que, una vez fue el legendario refugio de las sirenas. Su canto  hechizaba  a los marineros conduciéndoles a la perdición, encallando las naves en los arrecifes.
 La mitología griega refiere que “las sirenas viven en una isla del Mare Nostrum”, y se situó el lugar en el que ahora es conocido como “El escollo de las Sirenas”.

Para el descanso de todos yo no he visto ninguna. Aunque me hubiese encantado. 

Empezar así esta entrada es según mi hija que me acompaña en este viaje es una tontería , seguramente del titulo se reira y me invitaría a borrarla, pero sinceramente este tipo de leyendas me atrae tanto por su contenido como porque hacen viajar a la imaginación mas allá de lo que ves.

 

 

 

 Es una isla tiene dos caras, ambas dirigidas al turismo principalmente. Una la superpoblada de tiendas de consumo compulsivo de tiendas tan caras y tan juntas que la competencia entre tanta firma es difícil de ver tanto glamour en tan poco metros. Francamente fuera de mi alcance.  Y por otro lado  la otra parte de la isla una zona tranquila de empinadas cuestas, pequeñas casitas donde sus accesos son complicados casi rocambolescos... allí es  donde se respira la esencia de lo que esa isla es en general, geste trabajadora, hospitalaria ... gente que con la excepción de los taxis (grandes descapotables con toldos para 7 personas que cobran lo que les da la gana) y los bus que están locos... de veras .. si queréis experimentar unas anécdotas surrealistas coger uno.. es casi aterrador..

 

 

 

 

Pero vamos a lo importante. Los cinco trayectos de la isla son Marina Grande, Marina Piccola, Capri , Anacapri y San Constanzo. 

 

 Yo me quedo con los acantilados, las rocas...y desde luego con una pequeña embarcación que alquilamos (sin necesidad de ningún conocimiento náutico)  y cuatro horas al rededor de la isla... tan solo con un mapa turísticos,  dos vueltas completas entrando en grutas y pasando por el arco de los Farrallones de una belleza singular, saludando a otras embarcaciones,  bañándonos en sus aguas, pilotando una barca a motor que nos hizo disfrutar como protagonistas de una película maravillosa. 

Estos se encuentran pasada la Punta de Tragara,los “Farallones”, 

 

 

 

los tres enigmáticos colosos de roca que emergen de las profundidades. Debido a la erosión de las aguas y el viento se han abierto fisuras, cavidades y bellísimos arcos. Estas formaciones superan los 100 metros de altura, imponentes de cerca y si el mar no esta muy sereno mas... puede contemplarse la espectacular casa que se hizo construir el escritor Curzio Malaparte.

 

 

 

 

Después pasamos con la barca bajo el arco natural del “Farallón del Mezo, o de Stella”, que dejé inmortalizado en fotos. Es la imagen más divulgada de Capri. Pasada la Cueva del Buey marino, desembarcamos en el punto de partida. No sin antes pasar por la gloria de la isla "la grotta azurra"

La Grotta Azurra es una gran caverna que impacta al ver su reflejo sobre las aguas azules, cuentan que los lugareños creían que era un lugar maldito por ese color y que en ella habitaba el fantasma de Tiberio, que se mando construir una pasarela para sus baños en el año 30 dC. de la que aun quedan restos.  El color se desprende 

 Por ultimo su comida... Una comida mediterránea, y un paisaje maravilloso lo aglutina todo. Comer en un restaurante al borde del mar sobre un borde a la sombra de parras, un vino bianco y un poco de marisco y pescados de la zona... un enorme gelatto... que mas se puede pedir???  pues aún se puede pedir mas y para llegar a la perfección que también hubiese estado conmigo mi hija Elia. Besos amore.

 

Por ultimo esta foto.... lo dice todo Adios Capri.

Noi Vediamo.